La luxación rotuliana es una lesión articular de la rodilla donde se ven afectados el fémur y la tibia. Se produce un desplazamiento considerado de urgencia traumatológica en las que el principal problema que hay que descubrir son posibles lesiones vasculares, básicamente la arteria proplítea, la prolongación de la arteria femoral. Estas distensiones vienen acompañadas de roturas de ligamentos o meniscos.

La rodilla es una de las articulaciones más importantes con la que contamos en nuestro cuerpo, es la encargada de soportar nuestro peso y su cometido es que podamos correr, andar o saltar, entre otros movimientos, sin ningún tipo de problemas. Esto conlleva un gran desgaste y es la zona del cuerpo que más tiende a lesionarse.

Causas

La luxación de rodilla es debido a un giro brusco o a un fuerte golpe en la articulación. Aunque hay personas que no necesitan sufrir un traumatismo para lesionarse la rodilla. Por ejemplo, los pies planos hacen que los huesos de las piernas no estén alineados, también cuando el ángulo que existe entre la cadera y la rótula está muy pronunciado o las personas que no tienen fuerza en los cuádriceps son éstas las más propensas a arrastrar problemas de rodilla.

Tipos de luxación rotuliana

Al estar en continuo movimiento, este traumatismo se puede dar de diferentes maneras y por ello existen varios tipos de luxación de rodilla.

  • Luxación posterior de rodilla: Es cuando se desplaza la tibia por debajo del fémur. Este caso sucede un 33% de las veces en las que se produce una lesión de rodilla.radiografia
  • Luxación anterior de rodilla: En esta ocasión, la tibia se desplaza por encima del fémur. Es la más habitual en cuanto a lesiones y por normal general viene acompañada de la rotura del ligamento cruzado posterior. Es el 40% de las luxaciones.
  • Luxación externa de la rodilla: Es el 18% de los casos y surge de un desplazamiento lateral de la tibia.
  • Luxación interna de la rodilla: Es un deslizamiento medial de la tibia con respecto al fémur. Es el 4% de las luxaciones.
  • Luxación por rotación de la tibia sobre el fémur: Es la menos habitual de todas. Al ser la más completa en cuanto a movimientos es difícil que se dé. Combina el desplazamiento anterior y posterior con los laterales y mediales.

Síntomas y diagnóstico

Para conocer si realmente lo que sufres es una luxación rotuliana lo más recomendable es que visites a un especialista. Ya que los síntomas son muy parecidos a otro tipo de lesiones de la rodilla.

Comienza con una inflamación de la zona y continúa con una movilidad reducida de la articulación. La deformidad se puede acentuar según el tipo de desplazamiento que se ha tenido y, por supuesto, el dolor alrededor de la rótula. Un dolor complicado de frenar y que aún es más notorio si le acompaña una fractura de ligamento, menisco u óseo.

Por esto último, es conveniente asegurarse del alcance de la lesión. Además del desplazamiento del fémur o de la tibia podría haber alguna otra parte afectada que sólo se aprecian con una exploración más detallada de la zona.

Tratamiento

Primero de todo es acudir al médico para que recete los antiinflamatorios necesarios para aliviar los dolores y disminuir la hinchazón de la rótula. Por otra parte, el fisioterapeuta se encargará de controlar la inflamación con mucho reposo, mantener las piernas en alto y la aplicación de hielo, así se disminuye el riesgo sanguíneo y la inflamación de la rodilla.

luxación rotulianaLa rehabilitación será fundamental para que la movilidad vuelva en su totalidad. Llegados a este punto, el fisioterapeuta será quien tome las decisiones según vaya avanzando la lesión.

Aproximadamente, dos semanas después de la lesión, se aplicará férulas, hielo, vendajes para recolocar la rótula y ejercicios isométricos de cuádriceps para fortalecer la zona afectada y los movimientos. Después, entre la tercera y quinta semana, los ejercicios de fortalecimiento y potenciación son más intensos, esto ayudará al paciente a soportar sobre la rótula su propio peso. Otras actividades que se recomiendan son paseos, natación o bicicleta a un ritmo que irá en aumento a medida que la lesión vaya desapareciendo.

En caso de llegar al punto de una lesión de mayor gravedad, el siguiente paso es una operación quirúrgica. Con los avances técnicos la luxación de rodilla tiene una reparación de los ligamentos y meniscos más rápidas mediante la artroscopia. Las intervenciones se recomiendan cuando se ha cumplido los 14 días aproximadamente.

La luxación rotuliana se debe tener muy en cuenta si no quieres arrastrar problemas que afecten a tu día a día. Esta lesión la sufren un gran número de personas alguna vez en la vida, ya sea por genética o por factores externos.